Lecturas 001/ Bradbury, poeta de la ficción.

Síntesis / Bradbury, el reconocido autor de Crónicas Marcianas, tiene una prosa poética original. Una prosa marciana, podríamos decir…Ciencia Ficción y fantasía se mezclan bajo la maestría de su pincel surrealista para pintar caleidoscópicos cuadros de luces y sombras…Historias imposibles de un futuro posible. La prosa de Bradbury, aunque sombría es extrañamente luminosa, como el ocaso de una tarde de otoño, donde las historias caen de sus páginas, como la hojarasca, arrastrada por el viento del asombro…


>Cuando Ray Bradbury habla de su familia… uno no puede dejar de experimentar cierta inquietud cuando, con la soltura del escritor de ficción que es, dice sin mayor preámbulo :

“Julio Verne fue mi padre.
H.G.Wells fue mi tío sabio.
Edgar Allan Poe era el primo con alas de murciélago que guardábamos en el desván.
Flash Gordon y Buck Rogers fueron mis hermanos y amigos.
Ahí teneis mi linaje.
Añadiendo, por supuesto, el hecho de que, muy probablemente, Mary Shelley, la autora de Frankenstein, era mi madre…”

Naturalmente que, con este árbol literario-genealógico, Bradbury tenía, ya desde sus inicios, la carga genética asegurada para evolucionar como la criatura, el monstruo de letras, que la literatura contemporánea necesitaba para nutrir la imaginación de toda una generación.

Bradbury, eso sí se parece más a su madre.

Sus historias y relatos se asemejan al clásico engendro trágico del doctor Victor Frankenstein. Relatos sombríos y tétricos, hechos, hilvanados y unidos con maestría, con trozos y partes de otros cuerpos…los cuerpos inertes del horror y del espanto, formando oscuras criaturas dormidas, pero que mediante la descarga del miedo electrizante, cobran vida ante el asombro del desprevenido lector…

Pero los relatos de Bradbury, al igual que la ambigua criatura del Dr. Frankenstein, son como seres de oscuras y sombrías facetas, por un lado, pero de amable y fresca prosa poética por otro. Así, el trasfondo otoñal de sus cuentos, tienen, por contraparte, el encanto y colorido ambarino de las hojas secas cubriendo el húmedo pavimento gris y derruido...

Como sus relatos, así también es Bradbury, surrealista y fantástico…

El Bradbury real, nació en Waugekan, Illinois, E.E.U.U.. Estudió en los Ángeles, California. Su primer cuento lo publicó oficialmente en 1941.
Sus libros más famosos son Crónicas Marcianas, Fahrenheit 451 y El Hombre Ilustrado. Todas estas transformadas en su momento en películas con conocidos actores de entonces. Hasta ahora ha vendido millones de copias y ha escrito para la radio, el cine y la televisión.

Aunque se le cita a menudo como escritor de ciencia-ficción, la verdad es que su creación pertenece al género más amplio de la literatura fantástica.

En la ficción de Bradbury hay escasa ciencia.
Yo diría que la ciencia de Bradbury es más bien alquímica.

Su bagaje científico, que no lo necesita, se limita a la mecánica, a los engranajes, a los péndulos, al pivote, la polea y a la palanca. Su historias cobran vida gracias a la electricidad de Edison o a la biología de Darwin. Bradbury es el científico de Verne y de Poe. El laboratorio de Bradbury podría ser el del Dr. Zarkov de Flash Gordon o el de Frankenstein, con bujes, matraces, tubos de ensayo y serpentines de vidrio.

La imaginación científica de Bradbury es el resultado de un alambique, hecho de cobre, níquel , oro y plata. Un lenguaje que no necesita ser más preciso. La imaginación destilada, a la vez pictórica y expresionista de Bradbury, no echa mano ni de microprocesadores, ni de chips, ni de aceleradores de partículas, ni cohetes de iones, ni nada de última generación. Su capacidad poética puede transformar un montón de chatarras en maravillosos artefactos e historias…

Bradbury es un artífice.

Si alguien quiere conocer su obra, presento a continuación una pequeña selección de los cuentos más ilustrativos de su estilo…

Parto por un cuento de su libro más famoso, Crónicas Marcianas, llamado Usher II. Este relato corto está inspirado en uno de los cuentos de Edgar Allan Poe, La Casa Usher. Bradbury, hace aquí un cambio de escenario y de circunstancias, llevando la historia al planeta Marte. El resultado es muy original. Y otro de este mismo libro, se llama Encuentro nocturno, uno de sus cuentos más apacibles.

Luego, de su libro El hombre Ilustrado, el cuento La Ciudad es notable. Se trata de un relato que releo cada cierto tiempo, ya no tanto por el argumento, como para disfrutar de la forma en que está escrito. Realmente bueno.

Cuando me preguntan, por cual libro de Bradbury comenzar para conocer su estilo, pienso que El Hombre Ilustrado es el indicado, incluso por sobre Crónicas marcianas. El hombre Ilustrado, como libro, es el mosaico perfecto para degustar a un Bradbury fantástico, onírico y original…

La invitación queda extendida.
Espero que disfruten con los relatos… y no olviden leerlos con luz mortecina, y cerca de la media noche. Así, si se quedan dormidos, quizás entren por casualidad a una de sus historias…para despertar de un sobresalto, en la mitad de la pesadilla…

Sólo será un buen susto, pero les gustará…


Libros de Ray Bradbury (lista parcial)

Crónicas Marcianas / Ed. Minotauro
El Hombre ilustrado / Ed. Minotauro
Fahrenheit 451 (*) / Ed. Plaza y Janés
Cuentos del Espacio / Ed. Lumen
Cuentos del futuro / Ed. Lumen
Remedio para melancólicos / Ed. Minotauro
El Vino del estío (*) / Ed. Minotauro
Las maquinarias de la alegría / Ed. Minotauro
País de Octubre / Ed. Minotauro
Memoria de crímenes / Ed. Sudamericana

Todos los títulos aquí nombrados son recopilaciones de cuentos, excepto los con asterisco, que son novelas (*). Las editoriales pueden variar en ediciones actuales.